Una investigación encubierta, reveló que conejos están siendo sometidos a pruebas insoportables de drogas, se los mantiene muertos de hambre durante un máximo de 30 horas, se les niega el agua, y luego son encerrados en cajas, algunos no sobreviven a la terrible experiencia.
La muerte sería una mejor opción para los conejos, los que sobreviven simplemente los vuelven utilizar y los mantienen en jaulas de metal al descubierto que los obliga a volverse locos.
Una fundación pasó ocho meses en los laboratorios Wickham en Hampshire, Reino Unido, filmando en secreto sus procedimientos y dicen que el laboratorio causa ”sufrimiento terrible” a miles de animales en las pruebas a las cuales calificó, de “insensibles, arcaicas y extremadamente crueles".
Los conejos son animales sociales y, naturalmente curiosos y el operativo encubierto descubrió que no tienen la oportunidad de mezclarse y convivir entre ellos, algunos mostraban signos de trastornos mentales, tales como la estimulación repetitiva y morder los barrotes de la jaula.
El informe encontró que la capacitación del personal en las instalaciones fue “pobre”, las alternativas sin animales no fueron investigados adecuadamente y algunos animales murieron de una forma totalmente inadecuada.
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