Julio es padre de familia. Está casado y tiene dos hijos. Es electricista, gasista y plomero. Vive en Merlo y todos lo conocen, no sólo por su trabajo sino por su don de buena gente, ya que es uno de los primeros en brindar ayuda cuando alguien la necesita.
La semana pasada se lastimó el pie trabajando y fue hasta el hospital de Pontevedra para que lo atendieran. El calor era insoportable tanto afuera, como adentro, porque no andaban los aires acondicionados. Julio esperó su turno en la guardia, hasta que lo llamaron. Mientras los médicos lo curaban, él les preguntó cómo hacían para trabajar con semejante calor. "No hay presupuesto para arreglar los aires", le contestaron los profesionales.
Julio se dio la antitetánica y se fue, pero en su cabeza quedó rondando la idea de cómo solucionar el problema. Llegó a su casa y le contó a su familia lo que había vivido y les dijo que iba a volver para ayudar.
El gesto solidario de un colectivero que emociona a todos
"Nunca imaginamos que al otro día mi papá iba a ir. A pesar de que tiene mucho trabajo, a las 8 de la mañana fue hasta el hospital y arregló gratis los aires acondicionados de la guardia pediátrica, la de adultos y de otros sectores", dijo orgullosa Micaela, su hija.
La chica también contó que en el barrio su papá es conocido por su solidaridad. Más de una vez se acercó a darle una mano a algún vecino que lo necesitaba sin importar la hora. Para Micaela su papá es un héroe silencioso que todos los días le enseña el valor de dar una mano a quien lo necesita. Y quiere que todos lo conozcan, por eso contó en las redes sociales lo orgullosa que está de él. ..."Pidió hablar con la directora del hospital y arreglo GRATIS sin pedirle nada a nadie el aire acondicionado de la guardia. Tenes el cielo ganado papi estoy muy orgullosa de vos 💚 #EsUnBuenTipoMiViejo 💪" , escribió su hija.
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